Cueros lisos y generalidades: sugerimos utilizar únicamente ceras incoloras, franela y blem. El uso del calzador previene daños en la parte posterior del calzado. Para el guardado utilizar su caja o bolsa de tela. Recurrir a una horma acorde cuando no son utilizados puede ayudar a respetar su forma original. Tené en cuenta que debido a su naturaleza porosa la suela de cuero absorbe agua, es debido a esto que no se aconseja su uso excesivo al aire libre. Luego de un período de uso (incluso en condiciones normales), va a ser necesaria la reparación de la suela. 

Charol: si se mojó, secar con paño. Si está sucio, limpiar con franela apenas húmeda y secar. No exponer al sol ni secador.

Gamuzas: requiere de una limpieza a seco por su sensibilidad a la fricción y delicadeza. Usar cepillo para gamuzas y protector en spray antes de usarlos. En caso de mojarse, dejar secar en forma natural y luego cepillar. No utilizar secador ni exponer al sol. Para manchas podés aplicar un limpiador específico para dicho material. También podés pasar suavemente una goma de borrar blanca para lápiz.